El gobierno bonaerense y gran parte de la oposición no libertaria rechazaron la posibilidad de volver a imprimir las boletas tras la renuncia de José Luis Espert. La Justicia electoral deberá definir la situación.
Desde el Gobierno de la provincia de Buenos Aires consideran que la Boleta Única de Papel (BUP) “no debería reimprimirse” por dos razones: por incumplir la legislación y por los elevados costos que implicaría. El planteo se suma al rechazo expresado por distintos sectores políticos, tras la renuncia de José Luis Espert como candidato de La Libertad Avanza, que generó incertidumbre en el proceso electoral.
Costos millonarios y falta de sustento legal
El defensor del Pueblo Adjunto bonaerense, Walter Martello, señaló que una eventual reimpresión podría costarle al Estado unos 15 mil millones de pesos, sin contar el IVA. “La ley dice claramente que es el Estado el que debe imprimir, y no se puede deslindar esa tarea a una fuerza política”, explicó.
Martello elaboró un informe que detalla los argumentos legales, económicos y de seguridad que desaconsejan reimprimir las boletas. “La boleta única, al consignar listas completas oficializadas, mantiene su validez aun cuando se produjera la renuncia de un candidato”, remarcó.
Boletas listas y plazos vencidos
Desde la Justicia electoral informaron que más del 60% de las boletas ya están listas para su distribución, con los bolsones organizados en el Pasaje Dardo Rocha de La Plata. “El plazo para el diseño e impresión está vencido y no hay en la ley nacional ni en el Código Electoral ninguna mención a reimpresión por renuncia o fallecimiento”, explicó la senadora radical Nerina Neumann.
En ese sentido, recordó el antecedente de 2015, cuando no se reimprimieron las boletas tras la renuncia de Fernando Niembro. “La legislación es clara y reimprimir implicaría un gasto innecesario para el Estado”, sostuvo.
Oposición transversal al gasto
Distintos espacios políticos coincidieron en rechazar la medida. La diputada Nazarena Mesías advirtió que “si no hay plata para salud o educación, tampoco hay para reimprimir boletas”. En la misma línea, los candidatos del Frente Renovador Jimena López y Sebastián Galmarini remarcaron que “el capricho de Milei con Espert puede costarle al Estado más de 14 mil millones adicionales”.
El intendente de Esteban Echeverría y candidato de Unión Federal, Fernando Gray, presentó una denuncia formal ante la Justicia para evitar la reimpresión, argumentando el “enorme costo que esto representaría en un contexto económico crítico”.
Desde el espacio Nuevos Aires, el diputado provincial Fabián Luayza agregó que “si no hay recursos para los jubilados, el Garrahan o las universidades, mucho menos puede haberlos para solventar un gasto electoral de un partido particular”.
Qué definirá la Justicia
Ahora, la decisión final quedará en manos del juez federal con competencia electoral, Alejo Ramos Padilla, quien podría convocar a las fuerzas políticas para definir el futuro de la BUP. En el oficialismo bonaerense confían en que la Justicia tomará nota de los argumentos legales y económicos planteados y evitará un gasto millonario que, aseguran, “no tiene sustento jurídico”.
Fuente: Página 12.