El peronismo va unido pero negocia poder. La Libertad Avanza busca absorber al PRO. UCR y Manes intentan construir una tercera vía en un escenario fragmentado.
La provincia de Buenos Aires entra en la recta final del calendario electoral: el martes 9 de julio vence el plazo legal para la inscripción de alianzas y las principales fuerzas políticas se mueven contrarreloj para cerrar acuerdos clave que definirán el mapa de las elecciones legislativas.
A menos de una semana del cierre, el clima en los diferentes espacios combina tensiones internas, negociaciones al límite y pujas por el armado de listas, en un escenario donde la unidad es más una necesidad táctica que una convicción ideológica.
La unión en el peronismo
En el peronismo, la decisión de competir con una boleta única ya está tomada. El congreso partidario del PJ bonaerense en Merlo ratificó esa estrategia, mientras los principales referentes del espacio —Máximo Kirchner, Axel Kicillof y Sergio Massa— mantienen conversaciones para acordar cómo se repartirán los lugares en las listas por sección electoral.
La unidad no resuelve, sin embargo, la disputa de poder interna. La Cámpora, el Frente Renovador y el Movimiento Derecho al Futuro continúan negociando contrarreloj en busca de equilibrio territorial y representación política. El criterio general es priorizar a los candidatos “más competitivos” en cada sección, aunque la verdadera pulseada se dará el 19 de julio, cuando se oficialicen las listas.
La Libertad Avanza sobre el PRO
Del otro lado, la alianza entre La Libertad Avanza (LLA) y el PRO bonaerense está en plena gestación, aunque para muchos luce más como una absorción libertaria que como una coalición entre iguales. Según una encuesta de Isasi/Burdman, el frente entre ambos espacios tendría un 43% de intención de voto, pero sólo el 6% proviene del PRO, lo que deja en evidencia el retroceso del partido fundado por Mauricio Macri.
Aun así, los armadores macristas como Cristian Ritondo, Diego Santilli y Guillermo Montenegro insisten en cerrar el acuerdo con los libertarios antes del 9 de julio. En contraposición, sectores cercanos a María Eugenia Vidal y Silvia Lospennato se oponen a ese acercamiento con Milei y apuestan por reconstruir un nuevo Cambiemos, aunque su resistencia parece minoritaria dentro del partido.
Radicalismo y Manes: la apuesta a una tercera vía
Mientras tanto, la UCR y el nuevo espacio liderado por Facundo Manes y Juan Schiaretti trabajan para consolidar una tercera vía, con un mensaje de rechazo tanto al kirchnerismo como al modelo de Javier Milei. En la provincia, la estructura será coordinada por Julio Zamora, actual intendente de Tigre.
Manes viene de lanzar fuertes críticas al oficialismo nacional y busca captar al electorado moderado, pero su fuerza aún tiene un techo bajo en los sondeos. Las encuestas lo ubican entre el 4% y el 5%, y su performance dependerá de las alianzas que pueda cerrar con espacios menores en las próximas horas.
La UCR, por su parte, apuesta a despegarse tanto del PRO como de LLA, aunque enfrenta el desafío de no quedar fuera de juego si no logra sumar músculo territorial.
Fuente: 0221.